DALE TIEMPO

Siembra tu semilla por la mañana y siémbrala también por la tarde, porque nunca se sabe qué va a resultar mejor, si la primera siembra o la segunda, o si las dos prosperarán. —Eclesiastés 11:6, dhh

Suele ocurrir que las cosas sean cultivadas en oración durante meses, si no años, antes de que sucedan "súbitamente" en lo natural. Un agricultor puede recoger la cosecha en una semana, pero primero tuvo que dedicar meses a plantar, a desherbar y a cultivar, o la cosecha no habría sido tan grande o tan saludable. La siembra y el cultivo, la labranza de la tierra y la preparación para la próxima temporada, todo es un trabajo duro. Así es a menudo la oración.

ORACIÓN:

Padre, yo decreto y declaro que sigo siendo ferviente en la oración. No dejo de creer cuando parece que no hay ningún cambio. Sigo ocupándome de las semillas que he sembrado en oración y espero una cosecha en tu tiempo perfecto. Espero que las semillas que tú plantaste en mí también crezcan. En el nombre de Jesús, decreto y declaro que nada me detendrá de alcanzar el destino que tú tienes planeado para mí. Aunque lleve tiempo, yo sé que tus propósitos prevalecerán. En el nombre de Jesús, amén.

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Cindy y Trimm. Usado con permiso de Casa Creación. www.casacreacion.com