Bendecimos hoy tu mente, tu cuerpo y tu espíritu para que vivas experimentando y disfrutando la gracia de Dios. Que su paz y su gracias sean sobre ti en este día, para que todo lo que hagas, prospere. Que el bien y la misericordia de Dios te guien en cada momento y que su perdón te cubra en todo tiempo. ¡Amén!
En el libro de Isaías capítulo 54 versículo 4, dice: “No temas, ya no vivirás avergonzada. No tengas temor, no habrá más deshonra para ti. Ya no recordarás la vergüenza de tu juventud, ni las tristezas de tu viudez”. Este texto nos demuestra como es el corazón de Dios hacia nosotros. Él quiere que seamos libres del pasado, de la culpa, de la condenación, de la vergüenza y de los pecados cometidos. Muchos viven siendo atormentados por su pasado, pensando que fueron duros, infieles, cobarde, hirientes, descuidados y muchas otras cosas. Pero hoy es el día donde Dios quiere llenar tu corazón de amor, quiere limpiar y ablandar tu corazón de ese pasado difícil. El amor de Dios te llenará, recibe ahora su amor incondicional. Mientras el sol siga saliendo cada mañana, la misericordia de Dios se renovará sobre ti y te ayudará a comenzar con amor y nuevas fuerzas cada día.
Pronunciemos juntos esta oración: Padre todopoderoso acepto tu amor y tu perdón. Gracias por aceptarme como soy y por ayudarme a ser transformado cada día. Te pido que me llenes de tu amor por el Espíritu Santo. Te adoro y quiero estar en sintonía contigo, sabiendo que siempre me acompañarás y me darás otra oportunidad, en el nombre de Jesús. Amén.
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