Dios te llena hoy de su amor para que puedas sobreponerte a toda ofensa o agravio en contra de tu persona. Será un honor para ti, pasar por alto la ofensa. Bendice, perdona y ama a otros como lo Jesús lo hace contigo
1 Pedro 4:8 “Lo más importante de todo es que sigan demostrando profundo amor unos a otros, porque el amor cubre gran cantidad de pecados”.
Una de las cosas más difíciles son las relaciones interpersonales, en cualquier ámbito que nos toque relacionarnos con otros. Una de las claves para poder vivir en paz, es no ser tan exigente con los demás, aprender a ver a las personas como Dios las ve.
Puede que tengamos la actitud de descartar una relación, simplemente porque alguna cosa no nos cayó bien del otro, pero justamente nuestra madurez se muestra en amar a las personas como son, así como muchos deben tolerar malas actitudes de nosotros. Si eres una persona exigente, es probable que veas defectos todo el tiempo. Una persona vacía de amor, se transforma en odiosa y crítica de todos. Las peleas son de lo más común en personas rígidas y perfeccionistas.
En el matrimonio debemos amar al otro por sobre sus malas actitudes, pasar por alto la ofensa, enfocarnos en lo bueno y no en los defectos, y aunque todos tenemos cosas negativas, es más difícil ver una viga en nuestro ojo, que una paja en el ojo ajeno. Si Dios nos perdona y tiene paciencia, espera que lo mismo hagamos nosotros, y no que nos transformemos en jueces.
Hagamos esta oración:
“Padre Celestial, dame amor para ver a las personas como tu las ves. Quiero ser con los demás, como tu eres conmigo: perdonador y compasivo. No dejaré que la ofensa me domine. Decido perdonar, amar y bendecir, en el nombre de Jesús. Amén
