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Salmo 63 Biblia Hablada con Oración Reina Valera 1960

Salmo 63 con oración poderosa.

Reina Valera 1960

Dios, satisfacción del alma
Salmo de David, cuando estaba en el desierto de Judá.

63 Dios, Dios mío eres tú;
De madrugada te buscaré;
Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela,
En tierra seca y árida donde no hay aguas,

2 Para ver tu poder y tu gloria,
Así como te he mirado en el santuario.

3 Porque mejor es tu misericordia que la vida;
Mis labios te alabarán.

4 Así te bendeciré en mi vida;
En tu nombre alzaré mis manos.

5 Como de meollo y de grosura será saciada mi alma,
Y con labios de júbilo te alabará mi boca,

6 Cuando me acuerde de ti en mi lecho,
Cuando medite en ti en las vigilias de la noche.

7 Porque has sido mi socorro,
Y así en la sombra de tus alas me regocijaré.

8 Está mi alma apegada a ti;
Tu diestra me ha sostenido.

9 Pero los que para destrucción buscaron mi alma
Caerán en los sitios bajos de la tierra.

10 Los destruirán a filo de espada;
Serán porción de los chacales.

11 Pero el rey se alegrará en Dios;
Será alabado cualquiera que jura por él;
Porque la boca de los que hablan mentira será cerrada.

Hagamos ahora una oración basada en el salmo 63

Glorioso Padre Celestial hoy vengo a ti, temprano te buscaré porque estar en tu presencia es mi gran privilegio, mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela como la tierra seca desea el agua.

Sediento me encuentro de tu gloria, quiero enfrentar este día viendo tu poder. Tu amor inagotable es mejor que la vida misma, porque nada tendría sentido si no conociera tu perdón.

Levanto mis manos adorando tu precioso nombre, nada soy sin ti, nada puedo hacer en la vida sin tu amor, por eso te adoraré por siempre mi Dios, mi rey.

Tu satisfaces mi alma de tu alimento espiritual, mi corazón se llena con la delicia de la vida que hay en tus palabras de vida y de verdad.

Medito en ti todo el día y en las noches no me olvidaré de tu dulce compañía. Siempre me restauras y fortaleces, eres mi lugar seguro, donde me cobijo y te busco para ver las gloriosas riquezas y revelaciones de tu reino.

Soy tu hijo y eso me hace saber cuanto me amas. Eres mi ayuda por eso canto de alegría bajo la sombra de tus alas. Con todas mis fuerzas me aferro a ti, porque tomado de tu mano me siento seguro.

Quita de mi corazón el temor y apaga los dardos de fuego que el enemigo lanza contra mi alma. Reprendo las obras de oscuridad que se levantan contra mí y cancelo sus malvados planes en el nombre de Jesús.

Purifica mis labios para decir y vivir en tu verdad, líbrame de una lengua mentirosa, quiero serte agradable y hacer tu voluntad.

Gracias Dios mío por este maravilloso día en tu presencia, te lo entrego en tus manos para que me acompañes a cada paso.

Espero con expectativas en ti Señor Jesús. Amén.

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