Palabra Del Aliento Para Bendecirte Hoy

Palabras de Aliento

 

Viviendo en santidad

 

Pastora María P. Arrázola

Ver al Señor es vivir en santidad, que es vivir de acuerdo a los principios y preceptos de la palabra de Dios, estos principios son muy diferentes a los del mundo.

 

La prosperidad que el Padre nos quiere dar es el resultado de una vida ordenada. La prosperidad no es solamente tener dinero, sino tenerlo, y poder sentarte a comer en paz. Dios quiere bendecirte, prosperarte, sobreabundarte,
darte mucho más de lo que tu esperas, deseas o pides, pero no puedes esperar que Dios te bendiga y por otro lado abrir las puertas a una vida desordenada y que el Diablo te quite las bendiciones. ¿Perteneces al reino de la luz o al reino de las tinieblas?, no hay una mitad. Si algo está pasando en tu vida, o escasez esta viniendo a tu vida pregúntate si hay pecado, algo debes
estar haciendo que estas provocando que la mano de Dios se quite de tu vida.

No puedes vivir en pecado y esperar que la bendición de Dios venga a tu vida.
Hay que tener en cuenta que las consecuencias del pecado, te afectan a ti y a tu descendencia. Las consecuencias del pecado son muy amargas y muy largas. Si eres servidor en cualquier área de la iglesia tienes que vivir en santidad. Puedes engañar a todos y creer que te burlas de ellos pero de Dios nadie se burla. Cuando pecas Dios trata primero contigo, si sigues pecando
entonces permite que alguien cercano a ti lo sepa, si aun sigues, después a alguien de la iglesia, y sino haces caso, te expone públicamente. Cuando Dios nos expone el pecado es porque nos ama, porque el Padre que ama a su hijo lo corrige y lo disciplina. El día que peques y Dios no te diga nada entristécete.

Ser cristianos además de asistir a la célula, a la academia, a la iglesia es vivir una vida recta delante de Dios, cuando nadie más que Dios nos mira, ese es el verdadero tú. Cuando tú tienes a Jesús no puedes huir de su presencia.

El propósito es que el temor de Dios caiga sobre ustedes, porque estamos viviendo los últimos tiempo, Jesús esta a las puertas de venir por segunda vez, y los que están preparados van a ser arrebatados, y los que no, se van a quedar.

No queremos que nadie se quede porque serán 7 años tormentosos.

Ver al Señor es vivir en santidad, que es vivir de acuerdo a los principios y preceptos de la palabra de Dios, estos principios son muy diferentes a los del mundo. El mundo dice que puedes tener 2 o 3 mujeres siempre y cuando puedes mantenerlos a todos, la Biblia dice que una sola mujer u hombre podemos tener. El mundo dice que no importa si le coqueteamos a una mujer u hombre casada(o) siendo yo soltera(o), la Biblia dice que si miras a una mujer casada u hombre y la o lo codicias ya haz adulterado. Tenemos que transformar nuestra mente con el conocimiento de la palabra de Dios, porque cuando escuchas las cosas del mundo se te empiezan a pegar, y la palabra de Dios es la que te limpia la mente, tu alma y tu corazón. Hoy es un día de arrepentimiento, algunos no vemos prosperidad porque hay pecado. Es mejor ser frío o caliente porque el tibio Dios lo vomita. Tibios que no son lo suficientemente buenos para pecar pero tampoco para servirle a Dios, tibieza significa que estas sirviendo a dos señores, puedes estar en la visión y puedes estar sirviéndole a Dios. Nadie puede ser cristiano y seguir pecando y tener una vida de paz. Dios viene por una iglesia, santa, sin mancha y sin arruga. Sin santidad nadie verá al Señor. ¿Quieres ver al Señor o quieres que él aparte su
rostro de ti?

Debemos recuperar esa sed y ese temor a la palabra de Dios. Cuando el hijo pródigo pecó y regresó, dijo: he pecado contra el cielo y contra ti. Cuando nosotros pecamos lo hacemos contra Dios. Ningún pecado tiene justificación. Dios quiere bendecirte más de lo que estas, pero quiere que hoy arregles cosas en tu vida. La vida cristiana es como el malabarista del circo, porque si
miras hacia otro lado te caes; pero si caes Dios te levanta, si confiesas tu pecado Dios es fiel y justo para perdonarte, y si confiesas tu pecado y te
apartas alcanzarás misericordia. David pecó, adulteró, y después cometió asesinato, pero lo que lo salvó fue que se arrepintió inmediatamente, pero vivió una consecuencia, su hijo murió y Dios no le permitió hacer un templo, porque las consecuencias del pecado son amargas. Tú vas a sufrir por hacer lo bueno o por hacer lo malo tú decides, es mejor sufrir por hacer lo bueno. Nadie que te ame te pide hacer lo incorrecto. Papás cuiden a sus hijos, con quienes hablan, con quienes andan, a quienes visitan, quienes son sus amigos, porque si no les pones limites, la vida los va a dañar. Pero si le has enseñado van a ser felices.

Cuando tú como padre decidiste cortar esa maldición generacional, estas asegurando una vida de bendición para tus hijos. Dios quiere bendecirte, prosperarte, pero quiere hacerlo a su manera. Puedes divertirte sin pecar y
agradando a Dios.