El Señor te dio autoridad para reprender todo obstáculo y oposición. Pedimos que el Señor te conceda tus peticiones y te de la victoria que estás esperando. Le ordenamos a toda oposición que sea quitada y echada fuera de tu camino en el nombre de Jesús
En Marcos 11:22-23 (RVC) dice: “Jesús les dijo: «Tengan fe en Dios. Porque de cierto les digo que cualquiera que diga a este monte: “¡Quítate de ahí y échate en el mar!”, su orden se cumplirá, siempre y cuando no dude en su corazón, sino que crea que se cumplirá. Por tanto, les digo: Todo lo que pidan en oración, crean que lo recibirán, y se les concederá”. Éste texto es uno de los pilares del poder de nuestra fe y la oración. Jesús mismo lo enseñó explicando que debemos pedir y además decir lo que va a suceder, una cosa confirma la otra. Cuando alguien ora y pide, si en verdad tiene fe en Dios, sus palabras lo hablarán como algo resuelto, estará tranquilo esperando la respuesta y ordenando en el nombre de Jesús que se quitado y echado el obstáculo. Jesús le habló a la tormenta y esta se terminó, esa misma autoridad nos entregó para que enfrentemos lo que se nos opone. Al orar y recibir continuamente la palabra de Dios, estaremos creciendo en esta fe que mueve montañas. Pide a Dios lo que necesites y ordenale a ese obstáculo que se quite de tu camino.
Hagamos esta oración: “Señor te pido que quites todo obstáculo que me detiene y me des la victoria sobre toda tormenta y oposición. Ahora con la autoridad que me diste le ordeno a la escasez, a toda angustia, el dolor físico que se quite y eche en el mar en el nombre de Jesús. Amén”
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