Empezando el día en las manos de Dios

Por Esteban Correa

Hoy vengo a ti Señor a buscar tu rostro y tu dulce presencia. Gracias por este nuevo día que me regalas, porque puedo una vez más levantarme sabiendo que veré tu bondad.

Entrego este día en tus manos, dándote gracias por todo lo que haces, confiando que todo problema se solucionará, que toda herida sanará y que me guiarás a la victoria en toda situación.

Entrego en esta mañana toda carga emocional, aflicción y angustia en mi alma, pongo todo lo que me aqueja ante tu trono, sabiendo que eres fiel y justo para responderme.

No temeré en este día, porque tu eres mi Dios todopoderoso, y vengo a ti de todo corazón, humildemente a darte toda mi adoración, sabiendo que nada se escapará de tus manos.

Te pido hoy avanzar en el plan que has diseñado para mí, que me libres de todo lugar y persona que puedan traer tropiezos a mi vida, te pido ser una bendición para todos los que me rodean. Usa mi vida para ser un canal donde fluye tu presencia y testimonio. Ayúdame a perdonar y mejorar cada día. Derrama tu amor en mi corazón para que la luz de Jesús brille por medio de mi vida.

Inspira mi fe para ver tu mano, para conocerte a cada paso, que milagros ocurran en mi vida. Espero en tu bondad Señor, espero en tu amor cada día, sacia mi sed espiritual con el agua de tu presencia, con el pan de tu palabra y ungeme con el aceite de tu Espíritu Santo.

Abre mi entendimiento para conocer tu voluntad, para saber qué camino tomar, para poder trabajar con excelencia en todo lo que tenga que hacer, para que mis actividades y proyectos diarios estén bendecidos en todo tiempo y lugar.

Te pido sabiduría para toda situación que deba que enfrentar este día, que tu poderoso Espíritu Santo me guíe a la solución a resolver todo conflicto y salir de cualquier clase de crisis o problema.

Gracias Jesús por tu enorme misericordia, por haber entregado tu vida por mí, por abrirme la puerta de la salvación y darme la posibilidad de acceder hoy a tu trono de gracia y misericordia para hallar oportuno socorro.

Gracias porque me has elegido por amor, porque me conociste desde antes de nacer y preparaste un plan para mi. Me has abierto las puertas para experimentar tu amor y compañía, para conocerte profundamente.

Venga tu reino y hágase tu voluntad en todas mis desiciones, en mi salud, propósito, finanzas, trabajo, iglesia, ministerio, en todas mis relaciones familiares para que todo lo que haga, sea hecho bajo la cobertura de tu reino.

Gracias Señor porque tu reino es un reino de poder, fortaleza, esperanza, salud, abundancia, sabiduría y alegría eterna.

Que tus ángeles protectores vengan y acampen alrededor de mí para que mi pie no tropiece, ni haya estorbos en mi vida.

Envía tu ejército celestial para cuidar mi vida y familia. Que se hecha tu voluntad como en el cielo, así también en mi ser.

Me pongo ahora a cuentas contigo, pidiéndote perdón por todo pecado que haya cometido. Renuncio a todo lo que no te agrade, quita de mi vida todo lo que me pueda dañar. Líbrame de los lazos del cazador y enemigo, líbrame también de toda tentación, así viviré en la hermosura de la santidad.

Que la sangre preciosa de Cristo purifique mi vida en este día, me limpie de toda maldad y quita toda mancha de mi alma.

Renueva mis vestiduras espirituales para que esté sin mancha delante de tu presencia.

Gracias te doy por tu bondad, por todo lo que has hecho en mi vida hasta este día, por haberme guardado, fortalecido y renovado.

Padre Amado, sé que tienes mucho más para darme todavía, recibo ahora tu fortaleza para recibirlo, tu fuego y entusiasmo en mi corazón para seguir adelante, avanzando y levantándome rápidamente de toda caída.

Tu palabra dice que renuevas tus misericordias cada mañana, por eso hoy puedo estar en paz contigo, porque grande es tu amor por mi.

Cuida a cada uno de mis familiares, amigos y compañeros, te pido por aquellos que estén pasando un momento de desesperanza o tribulación. Guardalos del mal, protegelos del maligno.

Pido, creo, declaro y recibo todo esto en el poderoso nombre de tu Hijo Jesús Amén y amén.