Una esperanzadora revelación que te advierte, que la promesa de Dios está por cumplirse en tu vida. Parte I

El Dr. James W. Goll es el fundador de God Encounters Ministries. Es autor de bestsellers internacionales, entrenador certificado de lenguaje de vida, asesor de líderes y ministerios y artista discográfico. Ha viajado por todo el mundo, ministrando en más de cincuenta naciones compartiendo el amor de Jesús, impartiendo el poder de la intercesión, el ministerio profético y la vida en el Espíritu. Ha grabado numerosas clases con los paquetes de currículo correspondientes y es autor de más de cincuenta libros, incluidos El vidente, El profeta, El discernidor, El arte perdido de la intercesión y Orar con el corazón de Dios. James también es el fundador de GOLL Ideation LLC, donde se unen la creatividad, la consultoría y la capacitación en liderazgo.

Te compartiremos en dos capítulos, una extraordinaria profecía que recibió a inicios de este año 2022, que nos acercan a la convicción de que el Señor introduce en niveles muchísimo más alto, al que CREE. Decidimos compartirte su revelación en dos capítulos con la finalidad de que tu discernimiento se active, y puedas visionar ese más allá del 2022, del que nos habla el Dr.James.

“Mientras oraba en este próximo año, el Señor me ha dado cinco palabras proféticas (o ideas) para 2022”.

Me refiero a esto como «Un tiempo como ningún otro». ¿No es eso siempre la verdad? Estas son las revelaciones que el Espíritu Santo ha compartido conmigo con respecto a 2022 y más allá.

1. Cuando sea el tiempo de la cosecha para su vida: su cosecha está sobre usted. Sí, me escuchaste. Es tiempo de cosecha para tu vida. Simplemente no renuncies y no te rindas. ¡Dios quiere darte una «unción final» para completar tu asignación o tarea y terminarla bien! Tengo una palabra de exhortación para ti. Es tiempo de cosecha para tu vida.

Vayamos a las Escrituras y echemos un vistazo rápido a una lección pertinente de la vida de Noé, según se registra en Génesis 8:20-22 (NKJV).

“Entonces Noé edificó un altar al Señor, y tomó de todo animal limpio y de toda ave limpia, y ofreció holocaustos en el altar. Y el Señor olió un aroma relajante. Entonces el Señor dijo en Su corazón: ‘Nunca más maldeciré la tierra por causa del hombre, aunque la intención del corazón del hombre sea mala desde su juventud; ni volveré a destruir todo ser viviente como lo he hecho. Mientras la tierra permanezca, no cesarán la siembra y la siega, el frío y el calor, el invierno y el verano, y el día y la noche.’”

¡Mira esto! DIOS ESTÁ A PUNTO DE EXHALAR. Lo primero que hizo Noé después de que amainó el diluvio fue construir un altar al Señor y ofrecer un sacrificio aceptable al Señor Altísimo. Entonces el Señor olió el “aroma apacible” que Noé ofreció después del diluvio, y se dijo a sí mismo: “Nunca más maldeciré la tierra…”.

Esto es muy importante de entender. Lo último que Dios inhaló se convirtió en lo siguiente que exhaló.

¡Dios sopló un sacrificio aceptable, y luego exhaló una bendición extravagante! ¡Misericordia! ¡Porque lo que sube vuelve a bajar! Ah, ¿lo ves? ¿Lo entiendes? ¿Estás recibiendo esta increíble percepción?

Estás a punto de que Dios exhale una bendición sobre tu vida. ¿Por qué? Porque habéis estado sembrando y sembrando y sembrando. Y aún queda el tiempo de la siembra y la siega. Así que aguanta ahí. Gálatas 6:9 (NVI), “No nos cansemos, pues, de hacer el bien, porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos”. ¡Sí, tengo una palabra para ti! ¡Tengo una palabra de exhortación para ti!

TU COSECHA ESTÁ SOBRE TI. ES TIEMPO DE COSECHA PARA TU VIDA.

Oro para que el Espíritu Santo te fortalezca para mantener tu mano en ese arado y no mirar hacia atrás. Lo mejor no ha pasado por ti. La esperanza está parada justo en frente de ti. Porque aún queda tiempo de siembra y de siega. Es tiempo de cosecha para tu vida en el nombre de Jesús, ¡Amén y Amén!

2. Cuando la audacia se enfrenta a la corrección política : “Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino poder, amor y dominio propio” (2 Ti. 1:7).

Me fue dado un sueño dramático que me llevó a una visión abierta muy significativa acerca de los tiempos en que vivimos. Estaba parado en la plataforma del Ambassador Auditorium en Pasadena, California, y estaba sosteniendo un pergamino antiguo como un profeta de antaño, con la sensación de santidad a mi alrededor. Mientras desenrollaba el pergamino, apareció tinta y decía: “Dios no nos ha dado espíritu de cobardía” (2 Timoteo 1:7). Lo leí en voz alta ya que una autoridad inusual estaba sobre mí.

De repente, Che Ahn, el apóstol fundador de HIM, estaba de pie a mi lado derecho, y Cindy Jacobs, fundadora de Generals International, estaba de pie a mi lado izquierdo. Los tres estábamos ahora de acuerdo como apóstoles y profetas juntos, y juntos liberamos el espíritu de valentía sobre el cuerpo de Cristo para confrontar el espíritu de pasividad e intimidación que había estado impregnando a la sociedad en general.

Me desperté de este encuentro onírico y mi habitación estaba llena de “conocimiento divino”. Ahora sabía cosas que antes no sabía. Sabía que la palabra griega usada en esa Escritura para miedo no era la palabra normal, “phero”, sino otra palabra. Solo sabía esto. Sabía que había más en esta Escritura de lo que jamás me habían enseñado. Sabía que era importante captar este mensaje y que era imperativo que camináramos en humildad y, al mismo tiempo, con audacia. Dios quiere exponer y confrontar la falsa narrativa de la «corrección política» dentro de la iglesia y entonces tendremos autoridad actualizada para tratar con ella en la nación.

Aprendí que la palabra griega que se usa en 2 Timoteo 1:7 es “adleio”, que puede traducirse cobarde o cobardía. Esta palabra solo se usa dos veces en todo el Nuevo Testamento. Entonces, el Espíritu Santo está señalando un lugar donde hemos tenido un terreno común con el poder de las tinieblas y nos está llamando al arrepentimiento. Quiere vestirnos con lo opuesto al Espíritu de valentía, como lo es Jesús del León de la Tribu de Judá. ¡Amén y Amén!

¡Parece que Jesús aún no ha terminado de voltear algunas mesas!

3. Generación de obras mayores —Un requisito para pasar a las obras mayores de Jesús, necesitamos una convergencia entre los dos aspectos muy necesarios y complementarios del reino de Dios: la Palabra de Dios y el Espíritu de Dios. Necesitamos volver al modelo de Hechos 13 en el que la Escuela de la Palabra y la Escuela del Espíritu cooperan. (Véase Hechos 13:1–2.)

¡No más competencia! Sino más bien, ¡cooperación divina!

Al combinar nuestros dones en la gracia de Dios, podemos entrar en la generación de obras mayores con aquellos que han tomado en serio las palabras de Jesús en Juan 14:12 (NTV): “Les digo la verdad, cualquiera que crea en mí haced las mismas obras que yo he hecho, y aún mayores, porque yo voy a estar con el Padre.”

Al trabajar juntos en la orquestación divina, el poder de Dios puede fluir libremente y revivir los lugares secos sobre la faz de la tierra. Por lo tanto, bebamos profundamente para nosotros mismos y luego demos la vuelta y liberemos Su refrescante río con gran intención sobre los demás.

«Todo el que tenga sed, acérquese a las aguas; y los que no tenéis dinero, venid, comprad y comed. Venid, comprad vino y leche sin dinero y sin precio…. Y el Señor te guiará continuamente, y saciará tu deseo en lugares abrasados, y dará fuerza a tus huesos; y seréis como huerto de riego, y como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan” (Isaías 55:1, NVI; 58:11, NVI).

¡ESTE ES UN MOMENTO CRÍTICO Y FUNDAMENTAL EN EL QUE DEBEMOS VER EL RÍO DE LA PRESENCIA DE DIOS NO SOLO FLUYENDO HACIA EL TEMPLO DE DIOS, SINO TAMBIÉN SALIENDO! ESTO ES PARTE DE LAS NUEVAS FORMAS PARA LA NUEVA ERA.

Hemos enfatizado lo apostólico y lo profético durante las últimas dos décadas. Ahora veremos emerger una nueva era del evangelista una vez más. Este es el principal ingrediente que falta para el lanzamiento de la generación de obras mayores. ¡Pero el momento es ahora!