Las burlas, descalificaciones y menosprecio que has recibido, serán un motivo que Dios usará para levantarte, mostrando en ti su gracia y bendición. El Señor es tu defensa contra todo agravio que recibas.
Proverbios 3:34 dice: “El Señor se burla de los burlones, pero muestra su favor a los humildes” (NVI). La burla, el menosprecio y la descalificación, son cosas que salen de un corazón resentido que no han podido perdonar, ni superar algún maltrato en su pasado; por lo cual, estas personas, toman la costumbre de burlarse y despreciar a los demás. Tienen miedo a ser heridos otra vez y se anticipan burlándose ellos primero. Cuando alguién te descalifica, no lo escuches, porque lo que intenta, es hacerte creer que eres inferior. Estas personas necesitan sentirse superiores y atacan a quienes consideran una amenaza para su ego. A Dios no le agradan los burlones por ser un acto odioso, que tiene como fin destruir. Cuando alguien te burle o descalifique recuerda que tiene miedo de tu potencial, no te ofendas, ni te enojes porque el Señor te levantará y se glorificará en ti. El Salmo 30:1 dice así: “Te exaltaré, Señor, porque me levantaste, porque no dejaste que mis enemigos se burlaran de mí”.
Hagamos esta oración: “Dios Padre te pido que bendigas a todos los que se burlaron de mi, perdono a quienes me descalificaron y menospreciaron, no guardaré rencor ni resentimiento en mi corazón. Gracias Señor porque veré tu mano de poder protegerme y levantarme en victoria en el nombre de Jesús. Amén”. Por Esteban Correa