Por Mario Serrano
Hoy haremos una oración especial para alcanzar nuestros sueños y metas. Pero antes veremos algunas pautas importantes a tener en cuenta, basadas en la palabra de Dios y en sus promesas.
En Filipenses 3.13-14 LBA dice: “Hermanos, yo mismo no considero haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando lo que queda atrás y extendiéndome a lo que está delante, prosigo hacia la meta para obtener el premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús”.
Como hijos de Dios siempre debemos superarnos. Nuestra mirada debe enfocarse siempre hacia lo que esta adelante. El apóstol Pablo fue un gran realizador de sueños. Sus métodos y estrategias lograron extender el evangelio más que cualquier otro apóstol o siervo de Cristo de su época. Él presenta un método sencillo y eficaz para lograr nuestras metas y sueños y este método consiste en lo siguiente.
En primer lugar debemos soltar el pasado. En Isaías 43:18-19 LBA dice lo siguiente: “No recordéis las cosas anteriores ni consideréis las cosas del pasado.He aquí, hago algo nuevo, ahora acontece; ¿no lo percibís?”.
En este pasaje Dios aconseja a su Pueblo a no enfocarse en las derrotas y fracasos del pasado, pues a partir de ese momento comenzaría un tiempo nuevo y renovado y si ellos no miraban hacia adelante no podrían discernirlo o percibirlo.
En segundo lugar debemos mirar el futuro con expectativa y confianza, creyendo que cosas buenas vendrán. Necesitamos vivir este principio de fe y estar seguros de las buenas intenciones de Dios para nosotros, aunque todavía no las veamos. “Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová pensamientos de paz y no de mal, para daros el fin que esperáis” (Jeremías 29:11).Lo que recibiste en el pasado pudo haber sido bueno, pero debes moverte hacia adelante y capturar lo que nunca tuviste. Si no poseemos esta actitud es posible que no podamos ver con nuestro espíritu lo que el Señor está realizando a nuestro alrededor, con nosotros y a través de nosotros.
Proyecta tus pensamientos hacia tu futuro glorioso, y percibe en tu espíritu la fragancia de la lluvia tardía que humedece la tierra y produce fruto, abundancia y prosperidad. Recibe la gran cosecha, celebrando y dando gracias anticipadamente. La actitud de un corazón agradecido establece el milagro en tu vida. Alza tus ojos y por medio de la fe posee tu bendición.
Oremos ahora para alcanzar nuestras metas y sueños
«Padre Celestial, gracias por diseñar un futuro glorioso para mí. Confió en las buenas, agradables y maravillosas intenciones que tienes para con tus hijos. Porque tus pensamientos hacia mí son pensamientos de paz y no de mal.
Como dijo el apóstol Pablo dirijo mis ojos hacia lo que tengo adelante y olvido y corto las cadenas que me aprisionan al pasado.
Por el poder de tu Espíritu Santo y en el nombre de Jesús soy libre de toda persona, palabra, oración y decreto que hayan detenido mi avance e influenciado negativamente mi vida.
Cambia Señor toda actitud y disposición de mi corazón que no sea de tu agrado y que no me permita triunfar y lograr mis objetivos. Renuncio a una mentalidad de conformismo y temor al progreso.
Dame sabiduría, capacidad de planificación y estrategias inteligentes para ejecutar y así, moverme hacia adelante, al cumplimiento de tus propósitos.
Me anticipo celebrando y dando gracias por todo lo que harás.
Recibo fuerzas renovadas para perseverar enfocado hasta alcanzar la victoria.
Mientras hago esta oración el poder de Dios entran en acción abriendo caminos, estableciendo contactos y proveyéndome todos los recursos necesarios para que la visión de mi corazón se realice.
Que en todo lo que haga y emprenda a partir de hoy, te glorifique.
De acuerdo 3 Juan 2 Declaro el comienzo de una nueva temporada y establezco sobre mi vida salud y rejuvenecimiento, prosperidad, avance y crecimiento en todas las áreas conforme prospera mi alma.
Lo creo, declaro y recibo todo esto en el poderoso nombre de Jesús, Amen».
