¿Estás seguro de estar ayudando a las personas correctas?. Dios te ha colmado de bendiciones, y de pronto, estas se detienen. Te desesperas y no buscas el origen de hacia donde has dirigido las flechas de prosperidad que el Señor ha puesto en tus manos, así como los hijos son saetas en manos de las padres, de ese mismo modo, debes sembrar en buena tierra, esto implica que precises al que ayudas, y le instruyas en los preceptos bíblicos de trabajo, honra, y cumplir con lo establecido por Dios.
Una persona que despilfarre, el dinero que tú, con esfuerzo le has ofrendado, qué consecuencias puede traer en tu vida. Pídele al Señor que no ter permita alimentar ocio, ni codicias. Repite nuestra oración basada en Proverbios 10:22