¿Quieres vivir una vida emocionante? Caminar con Dios es emocionante. Enoc era un hombre que caminó con Dios. Génesis 5: 21-24 dice que Enoc caminó con Dios por 365 años. En otras palabras, él caminó con Dios consistentemente. No caminó con Dios basado en la conveniencia.
Caminar con Dios es la expresión bíblica para la comunión y la obediencia, lo que resulta en el favor divino en nuestras vidas. Enoc experimentó de este favor en la muerte que no vio. Él sabía que había más en la vida que sólo existir. Como Enoc, nuestro caminar con Dios se basa en nuestro deseo de dedicarnos a Dios con el propósito de conocerlo.
A lo que sea que estemos conectados tiende a influir en lo que nos convertiremos. Enoc fue único en su generación y cuando estamos conectados a Dios, es decir, conectados a su influencia, la gente de este mundo podrá ver a alguien que es diferente. Así que vamos a forjar algunas herramientas para nuestra vida diaria, aprendiendo acerca de caminar con Dios.
1. Dedicación
El caminar de Enoc con Dios se estableció en su dedicación para cumplir la voluntad de Dios. Dedicación no se basa en la conveniencia. Constantemente estamos siendo expuestos a una cultura que no le gusta pasar por ningún proceso. Nos dedicamos a Dios cuando dejamos de lado nuestra propia agenda para cumplir un propósito más grande. La vida es como un rompecabezas y cada uno de nosotros es una pieza de ese rompecabezas. La clave del éxito en la vida es encontrar dónde encajas y dónde funcionas. Este descubrimiento trae plenitud a nuestras vidas. Jesús se dedicó a Dios dejando de lado su propia agenda. Él dijo en Juan 6:38: «Porque he bajado del cielo no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que me envió». Nosotros caminamos con Dios al descubrir por qué estamos aquí y para qué estamos diseñados para hacer en la vida.
Recuerda: La contribución que hacemos a la vida es más importante que la duración de nuestra vida. Jesús sabía que la vida no se trata de la longevidad. Así que él vivió una vida «arriesgada» por dedicarse a llevar a cabo la voluntad de Dios. La razón por la que la gente se preocupa por las cosas que no aportan significado a sus vidas es porque carecen de la comprensión de la voluntad de Dios para sus vidas. Cuando caminamos con Dios tenemos una visión para nuestra vida. Cuando tenemos una visión o una revelación de Dios para nuestras vidas, no vamos a perder el tiempo. Seremos bendecidos con base en nuestra obediencia a la visión de Dios.
Lee, reflexiona y actúa de acuerdo a: Juan 6:38 Proverbios 29:18 2. La Presencia de Dios
Cosas pueden ocurrir en la presencia de Dios, que no va a suceder en cualquier otro lugar en el planeta. El Salmo 27:4-5 habla de la presencia de Dios «Una cosa he demandado a Jehová, esto es lo que busco: Que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo». ¿Qué le estás pidiendo a Dios? En lugar de pedir poder, vamos a experimentar su poder y favor viviendo en su presencia todos los días. ¡Caminemos en la misma sintonía con Dios!
Recuerda: Para estar en sintonía con Dios, tienes que moverte en la dirección de Dios. Nosotros caminamos con Dios cuando vivimos por esta convicción: «Sólo si Él me guía, voy a seguir». Tenemos que estar de acuerdo con Dios para caminar con él. ¿Pueden dos personas caminar juntos sin estar de acuerdo en la dirección» (Amos 3:3 NTV).
Lee, reflexiona y actúa de acuerdo a: Salmo 27:4-5 Amós 3:3 NTV
3. Centrados en Dios
Enoc demostró como caminar con Dios al estar centrado en el Señor en lugar de estar centrado en sí mismo. No se trata de que le digamos a Dios los domingos «toma el control de nuestra vida» y el lunes nosotros lo arrebatemos. El Salmo 16:11 dice: «Me mostrarás la senda de la vida; En tu presencia hay plenitud de gozo; En tu diestra para siempre». Cuando vivimos nuestras vidas con Dios en el centro, podemos experimentar 3 manifestaciones del poder de Su presencia.
a. Dirección.
No nos confundiremos en la vida cuando seguimos la dirección de Dios para ella. Esto habla de la trayectoria de su propósito para nosotros. Al igual que un corredor de maratón, cuando seguimos el carril correcto, toda nuestra provisión y bendición está por venir en la pista o camino del propósito de Dios. Dios pone los recursos que necesitamos en la vida en el camino que Él ha establecido para nosotros.
b. Cumplimiento en nuestras realizaciones.
Dios le da a cada uno de nosotros la gracia de hacer ciertas cosas bastante bien. Podemos cumplir la voluntad de Dios, según la gracia que nos ha dado. Podemos caminar en poder y autoridad sólo cuando estamos dentro de la voluntad de Dios.
c. La vida de felicidad que trae satisfacción.
No necesitamos ir tras tonterías porque estaremos satisfechos con Dios.
Recuerda: A menudo fallamos al buscar la presencia de Dios para encontrar la satisfacción que sólo él nos puede dar, porque buscamos hacernos plenos a nosotros mismos, y terminamos emocional y espiritualmente en bancarrota. No podemos estar centrados en nosotros y caminar con Dios al mismo tiempo. Al igual que Juan el Bautista, cuando caminamos con Dios, no vamos a compararnos con los demás. No podemos andar en el camino de otro y decir que estamos caminando con Dios. Cuando caminamos con Dios, nuestras vidas están centradas en Jesús y no en nosotros.
Lee, reflexiona y piensa de acuerdo a: Salmo 16:11 Juan 3:25-30
Randy Morrison es el pastor principal de la Iglesia Speak the World Church International en Golden Valley en Minnesota. Sus experiencias de la vida real con enseñanza basada en la Biblia, año tras año ha ayudado a transformar las vidas de miles de personas. Contacto: www.randymorrison.org