Si obedeciste, y aún ocurrían cosas en tu vida que detenían tus bendiciones, es porque de seguro lo que te faltaba por soltar, es lo que menos esperabas y lo que más te dolía, aquello en lo que pensabas que estabas obrando correctamente, y llegaban pequeñas señales que le indicaban a tu espíritu como testimonio, que algo no estaba del todo bien.
¿Ya lo soltaste?. Prepárate a recibir todo lo que estaba retenido, es ahora cuando conocerás el significado de caminar bajo la dirección de Dios. Hoy con Apocalipsis 3:7 te lo demostraremos.