Dios quiere alegrarnos, y borrar los días de nuestra aflicción; Él quiere respaldar toda obra de nuestras manos, somos nosotros quienes debemos acercarnos limpiamente, para gozar de sus promesas. En este día, recibiremos revelación de mucho de lo que el Padre entregó a Moisés, de cómo lo enseñó a depender totalmente de su voluntad.
¿Quieres sentirte de esta manera?
Te invito a escuchar con un corazón dispuesto, nuestro video de esta mañana y mi comentario del Salmo 90.
Esteban Correa.-