En la mucha palabra siempre hay pecado, es por ello que no te afanes cuando sientas que ya no deseas estar en los mismos lugares, y frecuentar las mismas personas. Es el Espíritu Santo que está dándote testimonio de lo que es bueno, agradable y perfecto para ti, conforme al propósito de tu llamado
No necesitas usar un lenguaje religioso para ministrar bendición en la vida de las personas, en tu lengua puede morar la espada del Espíritu que es la palabra, aliméntate de ella y serás instrumento de liberación sin que el resto se aperciba de ello.
Te invitamos a meditar en Jeremías 15:19 cómo te lo mostramos en este video.