Llena hoy tu corazón, de gratitud hacia cada milagro que diariamente el Señor hace en tu vida, y practica Apocalipsis 2:4-5 dando testimonio de que tu amor por Jesús no será apagado ni por las muchas aguas.
Vive llenando tu copa, meditando en cada bendición que Dios te ha dado, aún sin que tú le conocieses. Declara que cada prueba, te fortalece más, y vive conforme al amor incondicional del Padre.